La microbiota es la nueva niña bonita de la salud y la belleza de la piel.
Y creo que no se habla mucho de ello y sobre todo creo que no le prestamos suficiente atención. Y lo digo por mi, porque hasta hace poco no sabía su importancia y la importancia de tenerla equilibrada. Sinceramente os cuento que era de las que casi presumía por no cuidarme, le prestaba cero o nada de atención a la hidratación, al cuidado de la piel.
Ha sido recientemente que he empezado a cuidármela, pero sobre todo a entender la maravilla de tener piel de cara y cuerpo hidratada, jugosa, con aspecto saludable. Y claro, es que eso refleja mucho. Y si, quiero estar sana, hidratada y jugosa, jajaj. ¡He dicho!.
Hoy me gustaría hablar de la microbiota, porque hace poco que la he descubierto y me ha ayudado a entender un poquito más esto del cuidado de la piel. Lo dejo por si a alguien le puede servir como me ha servido a mi. Ya sabéis que yo voy como a lo básico, resumido y de la manera que yo lo entiendo. Si queréis profundizar más, hay mucha info en la red. Pero empecemos por el principio.
¿Qué es la microbiota?
Es el conjunto de microorganismos como hongos, bacterias y virus que hay en una zona en particular. Existen varios tipos: el intestinal, vaginal, oral, cutáneo, ocular… Del intestino ya hemos oído hablar mucho más pero de la piel y del resto tengo la sensación que no tanto.
La microbiota se forma al nacer y cambia con la edad. No tenemos forma de influir en estas condiciones genéticas. Pero sí podemos ayudar a nuestra microbiota manteniendo un estilo de vida equilibrado. Está formada por hongos, bacterias y virus (que son de los buenos) creando esta capa protectora y, las cosas como son, es algo que vamos maltratando con los años. haciendo que se desequilibre, y una microbiota desequilibrada nos lleva a tener enfermedades cutáneas como piel seca y sensible, acné, rosácea o dermatitis atópica.
Además de para la salud, tener la microbiota rica, fuerte y bien equilibrada es fundamental en la apariencia de la piel. Una microbiota en desequilibrio envejece, queridas amigas, así es. Es cuando se ve la piel apagada, súper reseca, cuando te pica… y cuando está en equilibrio es cuando la notas jugosa, hidratada, en definitiva, saludable.
Y también se incluye el cuero cabelludo, que cuando está saludable no aparece caspa, ni picores, ni descamación. Así que no maltratar a nuestra microbiota es algo fundamental y que tomamos a la ligera en muchas ocasiones.
Vale, muy bien, pero ¿cómo puedo cuidarla? No es difícil, es tomar un poco de conciencia de lo que utilizamos y cómo afecta a nuestro cuerpo. He resumido algunas de las cosas de las que podemos ser conscientes:
– Evitar utilizar productos de higiene agresivos. Es fácil distinguirlos, cuando tienen olores muy químicos, precios muy bajos… estos son muy destructores de nuestras bacterias
– La exfoliación cada par de semanas es muy buena y necesaria, pero cuidado porque un exfoliante con mucho químico o muy agresivo se llevará más de lo que necesitas. Existen en el mercado exfoliantes maravillosos y respetuosos con la microbiota. Mi favorito, porque cumple todos los requisitos y además huele que flipas es éste
– Las cremas hidratantes, buscarlas delicadas y respetuosas con nuestra piel. Ojo a las cremas hidratantes con “falsas expectativas e ingredientes”
– Buscar productos que tengan sustancias prebióticas y probióticas que ayudan a la capacidad regenedora y a envejecer con más salud (lo que yo digo el wellaging que me gusta más que el antiaging). Estas sustancias ayudan a tener nuestros bichitos en forma y activos. Y nada proporciona más salud a la piel. Ya existen productos en el mercado que las incluyen.
– Evitar siempre que se pueda los antibióticos, tanto en crema como vía oral. No tomarlos cuando no es necesario, se llevan por delante toda la microbiota intestinal y de la piel.
– No utilizar perfumes con mucho alcohol
– Ducharse o bañarse de forma excesiva puede agredir al ph de la piel
– La contaminación es otro gran enemigo. Existen ya productos que nos protegen de los agentes externos
En definitiva, menos es más, sin olores, sin químicos, sin tóxicos, pero con pre y pro bióticos, suaves, delicados y respetuosos. Os animo a que busquéis productos que los tengan.
Yo os hablaría de la que utilizamos en casa que cumplen todos los requisitos y que nos deja felices y tranquilos porque:
* tiene un complejo NBC7 con ingredientes que cuidan específicamente la microbiota, con esos prebióticos y probióticos de los que hablamos. Son siete ingredientes prebióticos y posbióticos que contribuyen al equilibrio naturalmente saludable de la microbiota a base de células madre vegetales, fermentos y azúcares, hidratándola y reduciendo los efectos de los factores ambientales nocivos.
*dura muchísismo, solo necesitas una pequeña cantidad de jabón por lo que no sobre-lavamos la piel
*huele de maravilla y todo muy sutil
¿Sabes cuando te relajas porque sabes que estás en buenas manos? Pues eso nos pasa a nosotros.
Sea con mi marca favorita que os dejo para que conozcáis, (si queréis más info sobre esta línea me puedes escribir, que además tengo un descuento chulo para el pack de cuidado en el baño), o sea con la marca que sea, os animo a que prestemos más atención al jabón de ducha, de pelo, de manos… porque nuestra piel es importante y tanto para verse mejor, con una piel más saludable como para prevenir enfermedades de la piel, merece la pena.
¡Feliz día!!! y qué feliz de estar de vuelta
*la foto no es la mejor verdad? jajajaja!
No hay comentarios