Regalos que llegan al alma

No os puedo describir la sensación tan bonita que tuve un día, cuando llegó un paquete a mi casa, y dentro tenía un tapiz. Me quedé sin palabras pensando en el tiempo y el cariño que llevaba, y además pensando que es de una persona a la que no conozco pero a la que tengo un cariño especial. Para los que la conocéis a través de su maravillosa cuenta de Instagram, Eva Heras Castilla, ya sabéis de lo que hablo. Se nota en lo que se desprende de sus fotos, sus ganas de pensar diferente, de hacer diferente y de enseñarle a sus hijos y alumnos que otras vías son posibles. Todo esto nos lo contó en un precioso artículo para sindeberes donde hablaba del pensamiento creativo. ¿Lo leíste?.

Pues volviendo al tapiz. Llegó con una nota, y me alegró el corazón. Y llegó para quedarse en esta casa, y además, en cuanto lo colgué en la pared parece que ha estado ahí toda la vida. Encajó a la perfección. Bien parece que Eva me conociera o me haya visto alguna vez, porque los colores, la forma y el acabado no puede ser más perfecto para mi.

Se que dará vueltas, se que estará hoy aquí y mañana en otro sitio, porque nada me gusta más que cambiar las cosas especiales de sitio de cuando en cuando. Quería dedicarle este post a Eva, agradecerle el detallazo que tuvo, que además llegó cuando estaba en reposo absoluto y estas cosas cuando estás convaleciente se agradecen el doble o el triple.

No dejéis de seguir a Eva en su perfil de Instagram Eva Heras Castilla, y también en su otro perfil, Petits Artistes donde nos da mil trucos e ideas para acercar el arte a los más pequeños.

Bonito tapiz, ¿verdad? pero más bonito el detalle, llegado en un momento perfecto. Y esto es lo que tiene el mundo 2.0, estas estupendas sorpresas.  Se que os han entrado ganas de tener uno, pero Eva de momento no tiene tiempo para venderlos. Sabemos que sería un hit! pero también es cierto que dedica su tiempo a cosas maravillosas.

Buen martes!